El animador denunció las malas condiciones de los servicios de apoyo a la movilidad y la falta de preparación del personal, tras una experiencia personal que calificó como inaceptable.
A través de una carta publicada en El Mercurio, Mario Kreutzberger, conocido mundialmente como Don Francisco, volvió a manifestar su preocupación por las graves deficiencias en la atención a personas con discapacidad y adultos mayores en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago.
El animador denunció una reciente experiencia personal que consideró inaceptable y llamó a las autoridades a tomar medidas urgentes.
“El aeropuerto está discapacitado”, expresó de forma categórica Kreutzberger, criticando la precariedad de los servicios de apoyo para quienes presentan dificultades de movilidad.
En su relato, describió que llegó al terminal acompañado de una persona con limitaciones motoras, quien, pese a requerir una silla de ruedas, tuvo que desplazarse largas distancias para acceder a una.
“El acceso a la silla de ruedas obliga a caminar tres cuadras desde la puerta de ingreso. Esto es un sinsentido”, enfatizó. A esto se sumó un nuevo inconveniente: el equipo proporcionado estaba en mal estado. “Una de las ruedas no funcionaba, y me informaron que muchas sillas están deterioradas o fuera de servicio”, añadió.
El conductor de la Teletón también cuestionó la falta de preparación del personal a cargo de este servicio.
“Pregunté al joven que nos asistió si tenía algún tipo de capacitación, y su respuesta fue que no”, señaló. Incluso relató una situación hipotética ante una cuneta sin rebaje, y la respuesta del funcionario —a su juicio— evidenció un desconocimiento que podría derivar en accidentes graves.
En su trayecto hacia la puerta de embarque, Don Francisco se encontró con otras personas mayores enfrentando dificultades similares. Una de ellas le aseguró que debió caminar más de 25 minutos para llegar a su destino. “Esto ocurre con frecuencia. Hay muy pocos carros eléctricos y no dan abasto. Además, las líneas aéreas se desentienden del problema y lo atribuyen a la administración del aeropuerto”, indicó.
Ante este escenario, Kreutzberger hizo un llamado concreto a los ministerios de Obras Públicas y Salud, así como a la concesionaria Nuevo Pudahuel, a conformar una mesa de trabajo para abordar con seriedad esta problemática.
“Los pasajeros con discapacidad y los mayores merecen un trato digno y eficiente”, recalcó.